Martos, el pueblo que entre piedras y olivos encontrarás su historia

En la Sierra Sur de Jaén. A menos de 30 kms de la capital. Podemos hacer un paseo en el tiempo por las calles de Martos, acompañados de Trekkapp. Conoceréis la huella que nos han dejado las diferentes generaciones que han pasado por aquí.
Paso a paso y piedra a piedra, vamos descubriendo una historia construida por los recuerdos e ilusiones de sucesivas generaciones de antepasados. Siempre en torno a un elemento central, la torre del homenaje.
A su alrededor, descendiendo hacia el resto de barrios desde esta atalaya, vamos encontrando iglesias, el antiguo hospital o la antigua cárcel. También fuentes y casas de importancia, y siempre bajo la atenta mirada del castillo de la Peña de Martos.
En nuestro discurrir, alcanzamos la antigua estación de Ferrocarril. Nos adentraremos en los alrededores de la villa. Disfrutando siempre de un mundo de sabor y aromas.
A lo largo de 5 kilómetros discurrimos por la parte marteña de la vía verde del aceite. Una inmersión en la zona rural de Martos y en su riqueza natural. En el mundo de las aceitunas con las que una vez prensadas y filtradas se consigue su mayor tesoro, el aceite de oliva.
Se trata de un paseo entre olivos centenarios, discurriendo por la antigua vía ferroviaria ya desmantelada y que transportaba en otros tiempo, este preciado oro líquido llamado aceite.
Con la vía verde del aceite en Martos, nos adentramos en el novedoso mundo del oleoturismo. Concepto que no podemos dejar de completar al disfrutar en la gastronomía local de degustaciones en alguna almazara. O bien añadidos a algún plato típico local. Sin lugar a dudas una manera de hacer que nuestra visita y nuestro conocimiento de Martos sean completos.
A pie, o en bicicleta, solos o en familia, con niños o sin ellos, Martos es un destino abierto para todos los públicos y al que merece una escapada.